Octubre 2002
D. Manuel Barea.
El Arqueño
Toreando por el norte de España el novillero El Arqueño, viejo conocido nuestro y amigo de la casa, es cogido volteado y revolteado por el astado con el resultado que vamos a ver.
Manuel arrastra desde hace años una lesión de sintomatología recidivante típica del matador de toros.
La artrosis postraumática de primer dedo de la mano derecha ( en los matadores diestros )
Esta es una lesión irreversible que deforma la articulación y poco a poco, por el continuo hacer diario del profesional cambia y retuerce los huesos de la misma, siendo además muy dolorosa al entrar a matar.
Esta es la lesión que provoca los signos dolorosos cuando vemos los intentos de matar frustrados en las plazas de toros y que quita trofeos como ninguna otra.
Esto es lo que ocasiona que los toreros para entrar a matar se pongan esos extraños artilugios en la mano (ortesis )
Veamos unas imágenes
Artrosis aparte, el chico, que ya no es tan chico, llega hecho un Cristo.